Los trabajadores de Cuidamiau somos muy afortunados de tener un techo bajo el que cobijarnos, todos los días tenemos un plato sobre nuestra mesa y trabajamos con gatos que son igual de afortunados, pero los gatos que viven en la calle, no tienen esa suerte.
Es por esto que las propinas que nos dejan nuestros clientes no son para nosotros, ya que se destinan íntegramente a la compra de comida para gatos que no tienen hogar, comida que donamos a diferentes agrupaciones, santuarios, asociaciones o personas que altruistamente ayudan a los gatos.
Además, en nuestros hoteles realizamos talleres solidarios para recaudar material para donar o dinero que también se convertirá en alimento para gatos.